NOCHEVIEJA
EN LA INDIA
No
hubo nochevieja feliz
para
la niña india.
No
hubo nochevieja feliz
para
su inocencia.
La
raptaron del hogar
traicionando
su confianza
y
siete delincuentes,
muy
poco hombres,
la
violaron hasta matarla.
Ese
día quedó muerta.
Al
día siguiente,
venciendo
las costumbres
que
condenan a la víctima,
se
armó de valentía
y
denunció a los culpables
en
una comisaría.
¿Qué
amparo le dio la justicia?
¿De qué manera la protegieron?
Ese
día volvió a quedar muerta.
Los
mismos delincuentes
volvieron
a raptarla
y
la violaron hasta matarla.
Porque
sí, aquella niña india
ya
tenía encima la muerte.
No
contentos, la quemaron.
Los
violadores la quemaron, sí.
Y
los conocidos de estos
que
la presionaron.
Las
autoridades se acercaron
y
colocaron sus vagas manos
calentándose
al fuego.
El
fuego de otra injusticia.
Se
prendió fuego
para
tratar de olvidar,
se
prendió fuego
para
gritarle al mundo.
El
dolor de las quemaduras
y
del alma ultrajada
acabaron
con su vida
esta
pasada nochevieja.
No
hubo nochevieja feliz
para
la niña india.
No
hubo nochevieja feliz
ni
asomo de justicia.
Autor: JOSÉ RUIZ
Pretendía comenzar el año de manera alegre pero la cruel realidad parece que no quiere permitirlo. El mundo está lleno de injusticias exigiendo que la buena gente reaccione.
Noticia
del 31 de diciembre de 2013:
Una
joven que se quemó a lo bonzo la semana pasada, tras ser violada en grupo en dos ocasiones, murió hoy debido
a las graves quemaduras en un hospital de Calcuta, en el este de la
India, informaron fuentes policiales.
La
chica, de 16 años, murió debido a las graves quemaduras -que
afectaban a más de un 60 % de su cuerpo- en
el hospital RG Kar, donde había sido ingresada el pasado día 23
después de prenderse fuego en su casa.
De
acuerdo con la versión oficial de los hechos, la joven había sido
violada en grupo en octubre por siete chicos,
que la engañaron a través de un conocido para que saliera de casa,
la raptaron y después abusaron sexualmente
de ella por turnos en un inmueble.
Al
día siguiente, según recoge el diario local 'The Telegraph', la
chica acudió a una comisaría con su padre, donde
interpuso una denuncia contra los jóvenes por la violación, quienes
en venganza volvieron a raptarla y a abusar
de ella en un taxi.
Los
siete violadores fueron arrestados, pero entonces fueron los amigos
de los acosadores los que empezaron a
presionar a la joven para que retirase la denuncia.
"Mi
hija se encontraba bajo una presión constante para que retirase la
denuncia. La amenazaban casi todos los días,
así que nos cambiamos de vivienda, pero el acoso continuó. Padecía
depresión y tenía miedo a salir de casa",
aseguró el padre de la joven.
"No
acudí a la Policía porque pensaba que eso nos causaría más
problemas", añadió el progenitor, que es conductor
de taxi.
La
Policía aseguró que no encontró ninguna carta de suicidio en la
casa de la joven, que como se encontraba sola
cuando se quemó a lo bonzo fue socorrida por sus vecinos, que
tiraron la puerta de su residencia abajo cuando
escucharon sus gritos.
Después de lo que tuvo que soportar, ¿por qué creer que se prendió fuego ella?
